Con anterioridad el prestigioso equipo liderado por el Dr. Juan Berenguer Berenguer del Hospital Gregorio Marañon de Madrid, presentaron datos muy importantes en la población coinfectada por VIH y VHC. El año pasado publicaron en el Hepatology que después de completar un tratamiento con interferón y ribavirina (IF+RBV) los pacientes que alcanzaban la respuesta virológica sostenida (RVS), conseguían reducir las complicaciones y la mortalidad relacionadas con le enfermedad hepática. Posteriormente en el CROI de este año, presentaron en un póster oral que concluía que: conseguir una RVS, se asociaba a una menor progresión del VIH y mortalidad no asociada con el VIH.
En el ICAAC de este año, Juan Berenguer evaluó (al igual que hizo con la RVS el año pasado) el impacto de la Respuesta al final del tratamiento ETR en la mortalidad relacionada con el hígado y la progresión del VIH o muertes de causa no hepática. Por pacientes con ETR se entiende aquellos que no consiguieron una RVS, pero si una respuesta al final del tratamiento.
Para el estudio se utilizaron los pacientes recogidos en la cohorte de GESIDA “GESIDA 3603” (repartidos por 20 centros del territorio español). Se incluyeron en el análisis los pacientes que comenzaron tratamiento con IF+RBV desde el 2000 hasta el 2007. A estos pacientes, se realizó un seguimiento cada 6 meses, en el que se evalúo la supervivencia, eventos hepáticos, enfermedades relacionadas con VIH, TARV y datos inmunovirologicos. El seguimiento se realizo hasta que el paciente moría o hasta la ultima visita.
Los objetivos del estudio fueron evaluar las complicaciones relacionadas con la enfermedad hepática (DEA, EH, HDA, HCC, TOS), la progresión del VIH (según clasificación clínica de los CDC, y la mortalidad ( relacionada con enfermedad hepática, VIH u otras causas). Todas las muertes se reevaluaron por un “comité de mortalidad”.
De los 1428 pacientes estudiados el 74% eran varones, con una mediana de edad de 42 años. La mayoría eran ADVP con unos CD4+ a la inclusión de 528 y el 62% con CVP indetectable. Con respecto al VHC, el 60% de los sujetos era portador de un VHC con genotipo 1-4. El 30% de los pacientes presentaban además fibrosis avanzada en la biopsia hepática.
En la tabla anterior se muestran los resultados al tratamiento según el tipo de citocina utilizada ( aparentemente favorables para el interferón alfa). El 36% de todos los pacientes alcanzaron una RVS y el 15% una ETR (sin RVS). Los factores basales que se asociaban a una RVS fueron: utilización de interferón pegilado, la categoría CDC (A/B), Genotipo 2-3, CVP del VHC bajas, poca fibrosis por METAVIR y el no consumir alcohol.
La frecuencia de los eventos durante el seguimiento, según la respuesta al tratamiento antiviral, fueron lo apuntados en la siguiente tabla. Existe una diferencia estadísticamente significativa en los pacientes con ETR y sin respuesta en cuanto a las muertes globales, las relacionadas con la enfermedad hepática y las descompensaciones hepáticas. En la siguiente tabla se muestran los mismos resultados en tasas.
La descompensación hepática y muertes por causa hepática en todos los pacientes y según la respuesta a IF+RBV.
Los eventos relacionados con la enfermedad hepática en los 1428 pacientes coinfectados según la respuesta a IF+RBV
Estudio multivariante de los factores que se asocian de forma significativa con los eventos hepáticos. Al igual que la RVS, el alcanzar una ETR se asocian de forma a tener menos eventos relacionados con la enfermedad hepática.
En los pacientes coinfectados por VIH y VHC y tratados con INF y RBV, tienen mejor supervivencia aquellos que consiguen una RVS. Además, el presentar una ETR se asociaba con menos eventos relacionados con la enfermedad hepática y menos mortalidad que aquellos que no respondían. La RVS se asociaba con menos progresión del VIH y menos mortalidad por otras causa. En el caso de la ETR, no se asociaba de forma significativa ni a progresión del VIH, ni a muerte por otras causas.
Es una cohorte impresionante ( por numero de pacientes y por la metodologia utilizada). Los resultados de este estudio, son muy interesantes, supongo que habra que dar una explicacion de porque la ERT no consigue disminuir la progresion del VIH ni la mortalidad por otras causas. Posiblemente se deba a que la ETR sea un estado intermedio entre la no respuesta y la RVS en la que influyen tanto aspectos basales de los pacientes, como cineticos de tratamiento (esperemos que se aclare este hecho en la publicacion del articulo).
ResponderEliminarEn resultados publicados previamente en la cohorte GESIDA se ve que los pacientes con interferon 2b, eran mas ADVP, presentaban mas fibrosis hepatica que los que tomaban interferon 2a y ademas conseguian menos tasas de ETR. Seria interesante ver los resultados del estudio (objetivos), categorizados por tipo de tratamiento y por genotipo.